Otros destinos

jueves, 8 abril, 2021

Otros destinos. Debemos caminar un paso más y atrevernos a construir una relación social en la que el hombre no intervenga, ejercido, por ejemplo, por: elementos, momentos, procesos, equilibrios, interrogantes, fantasías o “simplemente vacíos”. Tendríamos que buscar defensas que nos fundamentaran de nuevo (ahora sí, falsamente) en el sentido trascendente del hombre. Un pensamiento o una decisión sin criterio ni utilidad. Las relaciones de hombre con su entorno en nada, absolutamente en nada, se semejan con el medievo de una moral y una ética hoy ya muerta y en descomposición. Esta generación lo ha iniciado, pero todavía falta un trayecto que ha de ser difícil y evolutivo (pero seguro).

Lo que acabamos de exponer supone haber superado criterios de liderazgo, organización, y posiblemente de estructura, que atisbamos posible en estos momentos y que corresponde al poder de la tecnología, la máquina, el tiempo real, el dato o los mercados. Todo esto que ya está aquí y que tendrá una fuerza extraordinaria, ha empezado a envejecer. Ha muerto antes de nacer porque otra “autoridad” más disruptiva se ve en el horizonte. Quizá el horizonte de la inteligencia artificial. En un horizonte que, aun, el hombre no comprende.

Por ese miedo que el subconsciente nos advierte, no podemos abandonar aún lo cercano, lo “real”, lo que nos hace vibrar y nos conmueve, aunque carezca de pasión vital y de proyección útil. ¿Será hedonismo renacido? ¿Será autocomplacencia? Al Ghazali nos propone “la destrucción de la destrucción”, posiblemente para quedarnos como estamos. Una nueva jugada de enroque. El pavor ante lo desconocido.

Vivimos desde siempre con miedo. Nos hemos acostumbrado al miedo como algo muy nuestro y genético. Sin embargo, los miedos que sufrimos e incluso heredamos se manifiestan como miedos neuróticos, basados en nuestra fantasía en nuestras falsas construcciones mentales y no en posibles amenazas que puedan llegar a ser reales.

“Miedos por lo que podría suceder, y no por lo que realmente está sucediendo”. No en vano, las personas nos pasamos la mayor parte de nuestra vida sufriendo por cosas que jamás nos sucederán.

De los famosos proverbios chinos hemos aprendido que: “si no sabes bien lo que tiene que hacer: párate y piensa antes de actuar” o “trabaja en el presente y guarda para tu futuro”. Por eso, es oportuno no olvidar que cada madrugada que vemos amanecer es un día que vivimos. El poder del presente. El valor y la emoción de nuestra realidad vital. La energía de nuestros sentidos en acción.

A título recopilatorio me gustaría recordar tres frases:

Walt Disney (hombre de acción) decía: “La forma de partir es dejando de hablar y comenzando a hacer”.

Para Napoleón (algo cursi, cínico y programático): “Tu cerebro es simplemente un negociador de esperanzas”.

Isabel Allende (siempre audaz) decía: “Al igual que cuando venimos al mundo, cuando morimos tenemos miedo de lo desconocido. Pero el miedo es algo dentro de nosotros que no tiene nada que ver con la realidad. Morir es como nacer: solo un cambio”.  

Mi último libro

Aura 73 Poemas

Últimos escritos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Utilizo cookies para asegurarte una mejor experiencia como usuario de mi sitio web. Si continúas utilizando este sitio asumiré que estás de acuerdo con mi política de privacidad